MI BLOG DE COCINA

martes, 24 de noviembre de 2015

EL HOMBRECILLO ROJO

Hola:

Hoy está lloviendo en mi ciudad. No es una cosa demasiado extraña, ya que yo vivo en un sitio donde llueve a menudo (o por lo menos lo hacía antes de este maldito cambio climático).

Lo curioso es que hoy, a despecho de las veces que he visto llover, al mirar desde mi ventana, he percibido algo distinto. Me ha parecido que la ciudad estaba tan triste que, iluminada por las farolas de luz anaranjada, tenía un aspecto casi fantasmal.

Las gentes, que pasaban arrebujadas en sus abrigos y cubiertas por sus paraguas, parecían no saber muy bien hacia donde ir, como si hubieran perdido el norte.

Los coches, con sus dos grandes ojos iluminados, se asemejaban a locomotoras que se habían salido de la vía y rodaban hacia un destino desconocido.

Al oir un pitido repetitivo y estridente, he fijado mi vista en el semáforo que tengo enfrente de mi casa y he visto al "hombrecillo verde" condenado a andar y andar sin llegar nunca a ninguna parte. No se por qué, se me ha ocurrido que "el hombrecillo verde" estaba más triste que de costumbre.

Poco después, ha salido el "hombrecillo rojo", quieto como una estatua y, pensaréis que estoy loco, al cruzarse una gota en el camino de mi vista, me ha parecido que él estaba llorando. No se muy bien si estaba llorando de tristeza por su fatal destino, siempre viendo pasar a la gente y sin poder moverse, o estaba llorando por nosotros y por nuestro futuro.

Un abrazo "triste",

Esteban

2 comentarios:

Lourdes dijo...

Vaya, hoy estaba mi Esteban tó meláncolico, no?
Sí, eso es lo que tienen los días de lluvia, así que imagino que allí por el norte, estaréis melancólicos día sí, día tb...
:)

Besos!!!

Esteban dijo...

Si Lourdes si! es lo que tiene! Pero yo no estoy melancólico todo el día.... solo a ratos!
Además....¡yo vi lo que vi!

Un abrazo

Esteban