MI BLOG DE COCINA

jueves, 19 de mayo de 2016

Y HITLER VOLVIÓ …. Y LE AMARON

Hola:

Todavía tengo los escalofríos que sentí al leer esta noticia….. ¡Y creo que tardaré tiempo en quitármelos de encima!.

Supongo que sabéis que el director de cine David Wnendt acaba de estrenar en Alemania la película “HA VUELTO” (basada en el libro del autor Timur Vermes) que pretende ser una sátira sobre un Hitler que se despierta de repente en el año 2011 y se encuentra una Alemania, como es lógico, totalmente cambiada.  La película, en si misma, parece ser simplemente “inocua” pero lo que pasó durante el rodaje de la misma no.

El actor, que interpretaba a Hitler, Oliver Masucci, describió las reacciones de la gente que se acercaba a él durante el rodaje y….¡eso es lo que me da miedo!.... por lo visto una mayoría le abrazaba, le contaba sus problemas y miedos, ….  Esto, unido al triunfo de los partidos xenófobos en Austria, los excelentes resultados de Marie Le Pen en Francia, puede ser una peligrosa tendencia de la que “alguien” debiera estarse ya ocupando.  ¿Está volviendo a germinar la semilla del odio racista en Europa?

Alemania ya inició (y perdió) dos guerras que destrozaron Europa. ¿Habrán aprendido la lección o volverán a “cagarla” como hicieron en el pasado?.

Desde luego, el descontento de las clases menos favorecidas, por las políticas de la señora Merkel (como ya pasó en la época de la República de Weimar), no ayuda precisamente al mantenimiento de la fe en la democracia.  El miedo a la pujanza de los movimiento yihadistas, tampoco, la inmigración desordenada y la falta de integración del colectivo musulmán, en las sociedades de acogida, son también un caldo de cultivo que puede avivar las llamas del racismo.

Curiosamente, en países como España (o Italia), el descontento se ha volcado hacia el lado contrario. No sé si es porque tenemos más reciente la dictadura de Franco o porque la idiosincrasia latina nos hace manos proclives a aceptar la disciplina impuesta por los dictadores pero……. ¡sigo teniendo miedo!.

¡Qué alguien haga algo, por favor!



Un abrazo “asustado”,

Esteban