MI BLOG DE COCINA

jueves, 25 de febrero de 2010

ENERGÚMENOS Y CIA.


Soy lo que se viene en llamar “un hombre tranquilo”. No creo que me haya pegado con alguien más de dos veces en mi vida y ambas de muy muy joven. Creo que la violencia nunca es el último recurso (solo lo es para los incompetentes, como decía uno de los personajes de Isaac Asimov en “La Fundación”) y siempre hay una forma de resolver los conflictos sin llegar a los palos y pedradas. Ante la pregunta de si sería capaz de matar por alguna razón solo puedo responder que para defender a mi familia, que es lo que realmente me importa en la vida. Por supuesto, ni dioses, ni banderas, ni ideas son, para mi, causas suficientes para ejercer la violencia.

No me considero un cobarde por ello. Cobarde es el que agacha la cabeza y se traga, sin protestar, la opresión. Yo, con las limitaciones de un ciudadano anónimo normal, me niego a “sufrir en silencio” las injusticias y grito tal alto, como puedo y sé, contra ellas. Como dijo hace mucho tiempo el mejicano Benito Juarez (parafraseado después por Doloes Ibarruri “La Pasionaria” y más tarde por “El Che” Guevara), soy de los que prefiero “morir de píe que vivir de rodillas”. Pero “morir de píe” no significa, necesariamente, hacerlo empuñando un arma.

Veo con enorme frustración como la violencia se ha instalado en nuestras vidas. No me refiero ahora a la violencia “con mayúsculas” (terrorismo, guerras….) sino a esa otra violencia que es mucho menos sangrienta pero, incluso, más bochornosa, a saber, la de los hinchas de futbol. Cuando alguien mata (o muere) por defender una idea, por lo menos tiene una apariencia de honorabilidad, sino objetiva si para “los suyos”. Pero cuando uno se lia a mamporros por que se ha pitado un penalti (por más que sea injusto) en contra de su equipo, ni siquiera tiene una apariencia de hacerlo por una “gran causa” sino que cae en el más espantoso de los ridículos

No hay más que mirar con detenimiento las imágenes de TV cuando narran algún incidente violencia en los campos. Si os fijáis en las caras de los que participan, veréis que todos ellos tienen los ojos inyectados en sangre, la cara deformada por un rictus animalesco,……. Se convierten en energúmenos descerebrados que mejor estarían encerrados en las jaulas de un parque zoológico que sueltos por la calle.

Lo curioso de estos energúmenos es que puede que, en su vida normal, sean personas perfectamente educadas de las que ayudan a las ancianitas a cruzar el paso de cebra y ceden el asiento a las embarazadas en los autobuses. ¡ Míedo me da pensar en ello ! ¿será que el vertiginoso movimiento del balón provoca en el espectador algún tipo de descarga de adrenalina que incita a la violencia? . Tema de estudio para los Sociologos, Psicologos y demás eruditos ……….

A mi me gusta el futbol, me gusta que gane mi equipo, veo los partidos importantes (no soy de los que se tragan todo lo que dan) y me alegro cuando gana, entristeciéndome cuando pierde pero, de ahí a pegarme con el vecino por un fuera de juego, va realmente un abismo.

Un abrazo “pacífico”,

miércoles, 24 de febrero de 2010

ALGUIEN TENDRÍA QUE HACER ALGO


Alguien tendría que hacer algo …..¡y parece que nadie quiere hacerlo! con…….

… el aumento del paro que tantos sufrimientos esta causando a muchas familias de nuestro país.

… el incremento de la delincuencia (por mucho que las estadísticas se maquillen para ocultarlo) que están haciendo a nuestras ciudades cada vez más inseguras.

… el deterioro de nuestro planeta (cambio climático, residuos,….) que posiblemente acabe con nosotros y, lo que es peor, suponga que nuestros hijos y nietos no tengan un lugar digno donde vivir.

… el hambre en el mundo que, por las cifras que se manejan es muy sencillo erradicar, es una vergüenza para todos nosotros.

… el auge de la pederastia (curas y no curas) que nos hace sonrojar cada vez que leemos una noticia en el períodico.

… la violencia contra las mujeres (doméstica, machista…. o como quiera llamársele) que me hace sentir tan mal, con tanta “vergüenza ajena”, como hombre que soy.

… La falta de cultura de nuestros jovenes, que no han tenido la oportunidad de aprender de nuestra historia y, en consecuencia, corren el riesgo de repetir nuestros mismos errores.

… la pérdida de los buenos valores tradicionales (honor, palabra dada, puntualidad,…..) que hace que cada vez nos parezcamos mas a los animales en nuestras relaciones con los demás.

… el despretigio de la política, que debiera ser el más alto exponente de la vocación de servicio al ciudadano, que se ha convertido un estercolero inmundo.

… … … …

Alguien tendría que hacer algo…. ¿y por qué, de una vez por todas, no nos levantamos y lo hacemos nosotros?.

Un abrazo “asqueado”,

lunes, 22 de febrero de 2010

NOS VAN A HACER UN 67


Aunque soy hombre de convicciones, los que me habéis seguido sabréis que también soy hombre “de dudas”. No es un problema de mojarse o no en los temas (alguien me acusó, hace ya tiempo, de dar “una de cal y otra de arena”) sino de mi incapacidad genética para posicionarme al 100% en una postura sabiendo, como sé, que cualquier tema que trate suele tener muchas aristas y ser más complicado de lo que parece a primera vista.

Hoy, listos que son mis lectores que ya se habían dado cuenta, pasado el primer arreón emocional, voy a tratar el tema de la propuesta del Gobierno sobre el incremento de la edad de jubilación hasta los 67 años. Y hoy me voy a mojar, voy a soltar cuatro ideas y luego, luego……. ¡que cada uno piense lo que quiera!

No entiendo los argumentos que dicen que está en riesgo el sistema de pensiones. Ya me han explicado “por activa y por pasiva” que la pirámide poblacional está invertida, que cada vez vamos a ser menos los cotizantes y más los beneficiarios, que cada vez vivimos más y eso no hay sistema de bienestar que lo soporte…….. ¡pamplinas!. Cada vez vivimos más tiempo, eso es verdad, pero no todos. Desgraciadamente hay gente que se muere a los 50 años, después de llevar más de 30 años cotizando y, por lo que yo sé, no le han enviado la pensión al Cielo. Con los números, si se es hábil manejándolos, se puede demostrar cualquier cosa.

Yo creo que todo esto es un problema de voluntad política y de establecer prioridades de gasto. Con lo que se gasta en “otras cosas” (por ejemplo, al Gobierno se le llena la boca diciendo que somos “el 1º contribuyente de ayudas a Africa” y, que conste que la solidaridad me parece una cosa muy buena y deseable) se puede garantizar el sistema de pensiones indefinidamente. ¿Quién dice que las pensiones deban ser sufragadas con las cotizaciones exclusivamente? ¿Por qué la Seguridad Social debe ser un organismo “auto-financiado”? . Yo quiero que mis impuestos, los que llevo tantos años pagando religiosamente, sirvan para garantizar que podré vivir mis últimos años con diginidad lo que supone, entre otras cosas, que podré disfrutar de una vejez sin tener que ir arrastrándome al trabajo para morirme cuatro días depués (quien dice 4 días dice 4 años) casi sin tiempo para poder apuntarme a los viajes del INSERSO.

Hay un grupo en Facebook que se llama algo así como “A los 67 se va a jubilar tu p. madre”. No es que el nombrecito sea el colmo de la elegancia pero expresa muy graficamente lo que pensamos muchos cientos de miles de personas en este país. Porque no voy a hablar de las jubilaciones de los políticos, que me sube la tensión y se me pone el azucar por las nubes.

En fin, que mucho tienen que cambiar las cosas para que, al final de este proceso (manifestaciones sindicales y huelgas aparte, que también tiene tela el tema de los sindicatos) no acabemos siendo víctimas “de un 67”. Y digo yo, puestos a hacernos la pascua, ¿no podían haber elegido un 69 que suena mucho mejor?.

Un abrazo “cotizado”,

sábado, 20 de febrero de 2010

ESPEJO DE FERIA

Hola:

Ayer me miré al espejo y no me gustó lo que ví. Claro está que no me refiero a mi aspecto físico, que es el que es y cuyas limitaciones conozco hace muchos años, sino a esa imagen de tu interior que se ve, como en una nebulosa, cuando miras atentamente.

Como seguro que alguien está empezando a asustarse y, por otra parte, comprendo que el mensaje no está quedando nada claro (a lo que se ve, con la edad me estoy volviendo más críptico) me voy a explicar. 

Ayer, después de acabar la jornada laboral, me quedé charlando con unos compañeros y salió el tema de las relaciones entre el Occidente Cristiano y el Mundo Musulmán. Como era de esperar, este tema levantó ciertas pasiones y decidimos salir a la calle porque ”las chispas” que saltaban amenazaban con disparar la alarma contra-incendios.

Yo, que me declaro anti-militarista, como por arte de magia, me encontré defendiendo conceptos como el de “guerra preventiva” que no hace ni diez años me hubieran repugnado por inmorales. En el calor de la discusión no me dí cuenta de lo que estaba haciendo pero, al llegar a mi casa y al cumplir el rito de mirarme al espejo para ver si las patas de gallo me habían crecido otro milímetro durante el día, me dí cuenta de la incongruencia entre el postulado que había defendido y mí auto-decidida postura moral.

Lo que ví en el espejo era la cara de un hombre que había sucumbido a sus más profundas pulsiones (ira, miedo, afán de venganza) vencido sin duda por la impotencia por no ser capaz de comprender la actual situación del mundo, por haber perdido la capacidad de empatizar con los sentimientos, pensamientos y situación “del otro”.

Es curioso, de verdad, lo que el miedo puede hacer al hombre. La facilidad con que nuestras más profundas pulsiones animales afloran cuando peligra nuestra seguridad. Lo sencillo que es renunciar a nuestras convicciones racionales cuando nuestra burbuja particular, esa en la que nos envolvemos para mantener nuestra ceguera consciente, corre peligro de desvanecerse por la real o aparente agresión de lo externo, de lo desconocido.

Hoy mismo, después de haber analizado pausadamente este tema, no estoy seguro de nada. ¿Qué derecho tienen los demás a atacarme? ¿Por qué son mis enemigos aquellos a los que yo no he hecho nada? ¿No tengo yo derecho a defenderme, incluso antes de que me ataquen, si estoy seguro de que la agresión se va a producir? ¿No es la “legitima-defensa” un atenuante-eximente incluso en caso de homicidio?.

Hace unos años hubiera hecho una encendida defensa del entendimiento entre civilizaciones. No hace mucho, hubiera dicho, con la máxima convicción, que la guerra siempre es inmoral. Hace bien poco hubiera defendido que nadie tiene derecho a quitar la vida de nadie. Hoy, creo que sigo pensando lo mismo pero en la misma frase, donde antes decía “estoy seguro” ahora tengo que decir “creo”, no usando esta palabra en su acepción de “fe” (creencia) sino como indicación de duda.

La madurez tiene sus ventajas y sus inconvenientes. Una ventaja es la capacidad de atenuar el calor de las convicciones juveniles y uno de sus inconvenientes, quizás el mayor, es que ya nada es blanco ni negro y el color gris con que todo se tiñe, al la vez que añade perspectiva te hace, también, perder seguridad. Y….. ¡¡¡ no os imagináis cómo añoro la sensación de estar siempre seguro de las cosas !!!

Un abrazo “inseguro”,

Esteban

viernes, 12 de febrero de 2010

PANDILLA DE ILETRADOS

Hola:

He descubierto, con harto dolor, que la energía vital proviene de dos fuentes diferentes, a saber, la que produce un organismo en plenitud de sus facultades y la que proviene de la rabia y la desesperación. Ambas tienen la facultad de permitir afrontar la lucha diaria pero cada una de ellas lo hace de una manera distinta y con consecuencias diferentes. Mientras que la energía “sana”, cuando se consume, deja un cansancio natural que se corrige con un simple descanso reparador, la otra deja el cuerpo tan vacío como un globo desinchado, flácido, informe, arrugado, como si de un saco de piel se tratara. A veces te miras al espejo y piensas que lo que ves es mentira, que no es más que una cáscara vacía que se mantiene erguida solo porque unas invisibles varillas de hierro sostienen al monigote en píe.


Supongo que a nadie de le escapa que yo tengo “uno de esos días” en los que el levantarse de la cama supone un esfuerzo heróico y en los que necesitas una causa justa para poder sacar de las entrañas toda la rabia que te permita seguir adelante. O sea, y de ahí la introducción anterior, hoy necesitaba de la “energía rabiosa” para poder enfrentarme a un día normal. 


No me ha costado mucho encontrar algo contra lo que cargar toda mi ira. Solamente he necesitado una breve mirada a los diarios para darme cuenta de que “casus belli” no faltan entre las noticias. Sin embargo, hoy quiero sacar a la palestra un tema que no es noticia de última hora (ni siquiera de primero hora por lo que he visto) y no es otro que la falta de cultura en nuestros jóvenes.


Ayer, haciendo zapping, ví uno de esos programas de TV en los que entrevistan a gente por la calle y les hacen preguntas simples que (supongo que escogen los casos más risibles) los encuestados no saben contestar o responden con verdaderas burradas. Yo había hecho este mismo experimento varias veces (con identico resultado) por lo que puedo dar fé que lo que sale en la pantalla es siginificativo del nivel educativo de la población joven en este país. A respuestas como que “la guerra civil española comenzó en 1978″, que “los Reyes Catolicos eran Leticia y Felipe”, que “el primer presidente de la democracia fue Felipe Martinez” o que “Franco fue un rey que mandó despues de los Reyes Católicos” no me queda más que echarme a llorar y decir aquello de ¡Díos mío! ¿Qué va a ser de nosotros?.


Ya me imagino las respuestas que va a recibir este post. Casi puedo adelantar los argumentos diciéndome que estoy generalizando y de que “no toda la juventud es así”. Preveo, también, que más de uno pensará aquello de “ya está este carrozón clamado contra la juventud”. Que nadie se ofenda pero no me importa. No clamo contra la juventud porque ellos no tienen la culpa de que a nuestros políticos, por ignorancia o por una “progresía mal entendida” (lo cual es incluso peor), les importe un rábano que las nuevas generaciones no tengan ni pajolera idea de nuestra historia reciente. El título del post no estaba referido a los jóvenes, sino a los que van a conseguir, por culpa de su ineptitud, que el pueblo se convierta en una masa de borregos ¿o es eso lo que quieren?.


De todos modos, a ellos a los que critico, debo también darles las gracias. Gracias por conseguir que todavía sea capaz de sentir ira, de seguir teniendo ganas de gritar, de sentir que debo clamar contra la maldad y la estupidez, en fin, gracias por darme razones para “seguir vivo”.

Un abrazo “vivificante”,

Esteban


sábado, 20 de junio de 2009

SOBRE LO INJUSTIFICABLE

 


Como sabéis, me gusta considerarme una persona libre, que escribe sobre lo que le da la gana, cuando le da la gana y como le da la gana por lo que, si hay algo que me pone realmente furioso, es que me dicten el tema sobre el cual me apetece “soltar cuatro verdades”. Sin embargo, también soy una persona que se precia de hacer lo que hay que hacer, cuando hay que hacerlo.
Hoy, lo que toca es hablar del último asesinato de E.T.A. y no voy a ser yo él que eluda la tarea que me corresponde. No creo que merezca la pena dar ninguna explicación sobre los hechos ya que, seguro, todos vosotros habéis visto multitud de imágenes y crónicas así que, en los siguientes párrafos, voy a limitarme a dar opiniones, cosa que, por otra parte, es el objeto ineludible de este blog.
A pesar de ser consciente de la ínfima repercusión de mis palabras, quiero, mediante este post, transmitir mi solidaridad a la familia, mi horror ante la barbarie, mi vergüenza por que me utilicen, como vasco que soy, para defender la lógica de este acto, mi pena porque los seres humanos sigamos sin aprender nada, mi miedo de que esta situación no se acabe nunca, mi desesperación por lo poco que puedo hacer, mi compromiso con la razón y la palabra.
No hay nada, que justifique o absuelva del delito de matar a otro ser humano a sangre fria. Ni patrias, ni banderas, ni ideas, ni religiones pueden dar ninguna soporte moral al asesinato.
¿Cómo puede haber alguien que justifique lo injustificable? ¿Hasta que punto una mente no enferma puede aplaudir el que se quite una vida?. Reconozco que mi pequeño cerebro es incapaz de entenderlo y me temo que nunca lo hará.
En la mayor de las impotencias, lo único que puedo y se hacer, es escribir lo que siento. He empezado diciendo que no me gusta que me dicten mis artículos pero hoy, es lo que había que hacer y así lo he hecho.
Un abrazo “horrorizado”,
Esteban

viernes, 12 de junio de 2009

Y CON ÉL LLEGÓ EL ESCÁNDALO

 


No tenía yo hoy los "biorritmos" muy entonados y no me había planteado escribir nada. Sin embargo, he abierto un períodico, casualmente por la página de deportes, y me he escandalizado. Me he dicho a mi mismo, "Esteban, vete a ver la TV a ver si se te pasa un poco el cabreo" y ahí ha sido cuando he estallado. Después de escribir estas líneas tengo la sana intención de mirarme la tensión con uno de esos aparatos portátiles porque la debo tener por las nubes.
 

El titular de hoy reza: "1.000 euros a la hora". Supongo que la mayoría de vosotros, que sois ávidos lectores de prensa escrita, ya sabréis de que hablo pero, para beneficio de los que ha estado en la inopia estos días, aclaro que me refiero al modesto "sueldecito" que van a cobrar los Sres. Cristiano Ronaldo y Kaká (con acento en la segunda "a", no olvidar). Yo no he hecho el cálculo pero, por lo visto, si se divide los aprox. 9 M€ netos que van a cobrar, cada uno de ellos, por las 8.760 horas que tiene un año, sale más o menos esa cifra. Permitidme la broma "escatológica" pero, con unas simples divisiones obtenemos que, cada vez que uno de estos señores vaya al WC a hacer "aguas mayores", el Real Madrid le va a pagar apróximadamente unos 171 €, o lo que es lo mismo, el subproducto de su digestión diaria (si contamos un par de visitas al excusado por día) viene a salir por unas 57.000 ptas/Kg ¡¡¡ Ni las Angulas !!!. En fin que está claro que hay "mileuristas" y "MILEURISTAS".


No olvidemos, tampoco, que el club merengue, se ha gastado la bonita cifra de 160 M€ en su contratación. ¿Os imagináis la cantidad de cosas "buenas" que se pueden hacer con ese dinero?, ¿Os imagináis cuántas vacunas se pueden comprar? ¿Cuántos niños se pueden rescatar del hambre, con solo una fracción de esa cifra?.


He oido alegaciones de todo tipo: que "si este dinero se va a amortizar en un año", que "nuestro glorioso club tiene que tener los mejores jugadores del mundo al precio que sea", que "si.....", ¡zarandajas!. Estas cifras, manejadas con tanta desfachatez, como si fuera la calderilla que hace ruido en el bolsillo del pantalón, suponen a mi entender una verdadera indecencia.


Y, lo que es peor, todo parte de lo que a mi me parece una "megalomanía" de un presidente de club de futbol (si, me refiero a él) que, bajo la excusa de cumplir sus promesas, gasta de manera impía un dinero que mejor estaría dedicado a otras causas.


Sinceramente, no me extraña que los países llamados "pobres" nos odien con todas sus fuerzas. Viendo estas cosas, hay veces que yo también me odio a mi mismo por vivir en un país que consiente y aplaude estas actitudes.


Un abrazo "escandalizado",


Esteban

domingo, 7 de junio de 2009

CUANDO DOS SE HACEN UNO

 

Sorprendido (y feliz) estoy de la polvareda levantada por el post sobre “el botellón”. Esto me ha demostrado que el intentar adivinar que tema será más interesante es una entelequia y también me ha hecho entender, y esto es algo mucho más prosaico, que “el alcohol vende más que la política”.
Permitidme que os diga de donde ha salido el título de hoy. Supongo que a muchos de vosotros os sonará este lema del escudo de los EE.UU. (que tambien aparece en los dolares) que dice “E pluribus unum”(”de muchos uno”). Por cierto, para los que les gusten estas cosas, hay otro par de lemas que también tienen su miga: “One nation under god” y “In god we trust”. Bueno, que me estoy yendo por los cerros de Ubeda, yo lo que quería era escribir un artículo sobre La Pareja, me estaba volviendo loco buscando el título adecuado, cuando a mi mano a llegado una moneda del imperio y he visto la frasecita de marras. ¡Eureka!, he gritado… ¡ya tengo el títular!. Está claro que las Musas escogen caminos insospechados para insuflar la inspiración.
Antes de sequir argumentando, quiero aclarar que me da exáctamente lo mismo (o sea, como se decía antaño, “se me importa una higa”), el sexo de los integrantes, la forma contractual (civil o religiosa) elegida e, incluso, el número de los que la forman. Esto último merece la explicación de decir que he usado el término pareja porque no se me ocurría ninguno más adecuado, por corto, ya que otra opción hubiera sido el usar el socorrido “unidad de convivencia familiar” que me parece una horterada o el de “familia” que tiene otra implicaciones (como la presencia de hijos, sobrinos y demás parientes) que se salen del tema que quería comentar.
Voy al grano que, como siempre, me paso dos pueblos con los prolegómenos y luego no tengo líneas para desarrollar mi tésis que por cierto, allá va. Yo creo que el ser humano, aun siendo capaz de sobrevivir en soledad, desarrolla sin embargo todo su potencial “en pareja”. La relación de pareja es una relación que permite que se cree algo, dificil de explicar, que va más allá de la suma simple de los aportes de dos personas individuales. Cuando vivimos en pareja, somos algo mas y, cuando conseguimos encontrar a la pareja adecuada, somos “mucho más”. Es como si, en vez una simple amalgama, se produjera una verdadera reacción que diera lugar a un compuesto químico, con carácteristicas totalmente diferentes de los elementos individuales que lo forman.
Yo soy un defensor de la pareja, lo reconozco. No quiero decir con ello que convivencia entre dos personas (perdonadme que ahora reduzca el número a dos pero solo es beneficio de la claridad de la argumentación) sea perfecta ya que, de hecho, no lo es. No quiero decir que haya veces en que es mejor “no reaccionar quimicamente” con “el otro” porque la reacción es violenta y tumultuosa. Solo quiero decir que, en ocasiones, cuando se consigue la comunión de carácteres e intereses, surge algo que no tiene parangón. Algo que hace que las personas que intevienen se sientan completas, como si fueran perfeccionadas. Y eso, eso es algo que no se consigue de otra manera.
Algunos dirán que se trata de algo conocido como “el amor”, otros defenderán que son meras reacciones orgánicas a la presencia de hormonas, neurotransmisores, enzimas o que se yo. No se cual es la causa y tampoco se si me apetece mucho saberlo. Solo se que la felicidad sabe más dulce en compañia y la infelicidad es menos amarga si tienes alguién en quien apoyar tu cabeza cuando estás sufriendo.
Un abrazo “romántico”,
Esteban

domingo, 31 de mayo de 2009

FELICIDAD EN UNA BOTELLA

 
Estaba profundamente preocupado por la situación de Montse pero, como uno es muy respetuoso con la privacidad de los demás, no quise escribir un post sobre ello. Ahora, después de que su hijo Axel nos ha informado mediante un “comunicado” (hay que ver, estos famosos, que hacen comunicados de prensa y todo… ¡que envidia!) y que Montse ha vuelto con renovado ímpetu (no hay mas que ver “la cera” que ha dado en su comentario a mi último post) quiero decir que me alegro enormemente de que se encuentre mejor.
El tema de hoy, que no tiene nada que ver con Montse ¡faltaría más!, me ha sido inspirado por un artículo aparecido en la prensa local sobre unas quejas vecinales a causa de las molestias producidas por El Botellón en una zona de la ciudad. Como veis, hoy toca tema inédito en mi blog y casi podría asegurar que profundamente polémico pero ¿quién dijo miedo?.
Una de las pruebas más fehacientes de que me estoy haciendo mayor (madurito “de buen ver” por supuesto) es que cada vez entiendo menos a los más jóvenes. He estado haciendo examen de conciencia que me ha llevado a repasar algunos de mis post anteriores y he visto que, cuando trato temas que afectan a la adolescencia o a la juventud, se percibe casi siempre un poso de desconfianza y de falta de entendimiento. Sabéis que he clamado contra “el hedonismo” imperante, he criticado el vacío ideológico, he denostado el desprecio absoluto a las formas en el trato y, por último, me he asustado con su desconocimiento y desinterés por nuestra historia más reciente. No es, creedme que lo digo después de haber pensado mucho en ello, ningún tipo de “jovenfobia” (es que no he encontrado ninguna palabra que defina esta “imaginaria enfermedad”) ni hay ningún afán de revancha motivado por la sensación de pérdida o la nostalgia. Percibo, además, que estoy cometiendo una injusticia por el uso constante de una generalización tal vez infundada. Pero, es que lo siento así y así lo escribo, tal como me sale, sin pensarlo.
Me he extendido demasiado en los prolegómenos y ahora me queda poco espacio para explicar mi tesis. No entiendo el fenómeno del botellón. No entiendo que la gente se junte (pero no se revuelva) con el único objeto de emborracharse. Yo recuerdo los tiempos en que nos emborrachábamos, en cuadrilla, pero todo tenía un fin. Bebíamos para infundirnos valor para abordar a las chicas, para ser más locuaces, para cantar perdiendo la vergüenza, para ritualizar nuestro paso a la edad adulta,…. Ahora, con el botellón, por lo que he podido ver y oír, el único objetivo es perder la conciencia, cuanto más rápido mejor.
He oído toda clase de explicaciones-excusas, a saber, el precio de las bebidas alcoholicas, el prcio de entrada a los locales de diversión, el famoso “se conoce gente”. No me vale ninguno pero, menos que ninguno, este último. ¿Habéis observado que en un botellón los grupos no se juntan entre si?. Al final, cada grupo hace su botellón por separado y, da la impresión que solo se reunen para una especia de “autoprotección” que garantice la impunidad. Por cierto, no he hablado (y debiera) de las molestias que producen a los vecinos que tienen la desgracia de tener un botellón cerca. Ruido, suciedad, destrozos, en fin, para volverse loco.
Estoy seguro que mis comentaristas, de los que siempre espero una respuesta que me ilumine y que muy a menudo consiguen atenuar o incluso modificar mis convicciones, sean capaces de explicarme lo que considero inexplicable. Aunque, de verdad, esta vez lo tienen bastante difícil.
Un abrazo “perplejo”,
Esteban

martes, 26 de mayo de 2009

LOS PUEBLOS QUE OLVIDAN........


 
Hoy, contra lo que es habitual en mi ultimamente, voy a escribir. Hoy voy a vomitar, que no redactar, un post y lo voy a hacer solo para quitarme una espinita que se me ha clavado y se está infectando en la herida.

No voy a decir ni donde ni con quién, pero ayer y hoy he tenido la oportunidad de relacionarme, mediante conversaciones "de las de verdad", con gente que era unos 20 años más joven que yo. Os podéis imaginar que se ha hablado de "lo divino y lo humano" y han salido montones de temas en los que había diferentes opiniones y estas diferencias no estaban necesariamente relacionadas con la edad. Temas como el origen de la homosexualidad (por supuesto en ningún caso ha sido cuestionada su legitimidad o sus derechos), la preponderancia del condicionamiento genético sobre el social (o viceversa), todos ellos temas con mucha miga, se intercalaban con otros más ligeros como el próximo partido Barcelona-Manchester. Ha sido una verdadera gozada y yo, personalmente, no recordaba una conversación tan "refrescante" desde hace mucho tiempo.

Lo que quería comentar hoy es, sin embargo, algo que me ha dolido y dado miedo a partes iguales. algunas, no todas, de las personas allí reunidas, me ponían "cara de haba" cuando se mencionaban nombres de personas y organizaciones que lucharon activamente contra el franquismo. Simplemente "ni les sonaba". Cuando les he querido explicar que el hecho de que disfruten de un sistema democrático es, en gran medida, debido a la lucha de estas personas y organizaciones me han mirado con cara de pena y con evidentes muestras de estar pensando ¿De que habla éste?.

Para las personas nacidas después de 1.980 la democracia es, simplemente, el estado natural de las cosas. Nada saben y nada les importa (y perdonadme si estoy equivocado o generalizo demasiado) lo que sufrieron/sufrimos no hace tanto tiempo para que ellos puedan disfrutar ahora de esta libertad.

¿Qué hemos hecho mal?
¿Por qué no hemos sabido transmitir a nuestros jóvenes nuestro pasado?. Este es, para mi, un punto de reflexión en el que en un futuro deberé profundizar.

No os voy a cansar con muchas más lineas hoy pero, por favor, recordad que "los pueblos que olvidan su historia están condenados a repetirla".

Un abrazo "frustrado"

Esteban