MI BLOG DE COCINA

martes, 31 de enero de 2012

DEL BIEN Y DEL MAL

He escuchado, infinidad de veces, argumentaciones tendentes a demostrar que no existen ni el “bien” ni el “mal” absolutos.

Mi propia filosofía vital, que como siempre repito me hace ver los grises allí donde otros ven blancos y negros puros, me inclina a pensar que algo de razón hay en esas afirmaciones. Es más, ¡a veces incluso me lo creo del todo!.
 
Otras veces, casi siempre después de leer las crónicas de sucesos en los periódicos, flaquea mi convicción y entonces pienso que tiene que haber una línea clara que separe la bondad de la maldad, lo justo de lo injusto, lo correcto de lo incorrecto. La carne es débil y las tentaciones son muchas.
 
No soy especialista en “ética” o “deontología” ni tengo grandes conocimientos de “teología” así que no vais a ver en este artículo ninguna sesuda disertación sobre la moral natural. Solo soy una persona a la que le gusta reflexionar sobre las cosas que ve. Y, reflexionando, he llegado a una conclusión que, por obvia, puede resultar de perogrullo: hay una regla de conducta que nos puede facilitar el discernir cuando una acción que vamos a acometer es buena o mala “per se” y no es otra que “No hagas a los demás lo que no te gustaría que te hicieran a ti”.
 
He estado dando muchas vueltas al tema y, creedme, no he encontrado ninguna situación para la que no sirva esta regla.
 
Os doy dos ejemplos de casos dudosos:
 
CANIBALISMO: Estoy seguro de que, aunque esta práctica está/estuviera aceptada en algunas culturas, la persona que va a ser comida, en el último momento, no estaría precisamente contenta y, si tuviera la oportunidad y se salvara, seguramente cambiaría su percepción acerca de la licitud de esta conducta.
 
SADO-MASOQUISMO: Perdonadme, porque ya se que en este tema voy contra-corriente, pero me resisto a considerar que entre dentro de la normalidad una práctica sexual que consiste en infringir-recibir dolor. Cada cual hará lo que quiera y todo lo consentido es válido pero, hasta un practicante sado-masoquista mentalmente sano, sabrá que infringir dolor a otra persona que no lo consiente es inmoral.
 
Como uno tiene que agarrarse a algo en esta vida y yo, para no caer, me agarro a esta regla para permanecer cuerdo en un mundo que, cada vez más, me parece que está lleno de locos …. ¿o es que el loco soy Yo?
 
Un abrazo “¿aliviado?”
 
Esteban

lunes, 30 de enero de 2012

TEUTONIA

Hola:


Estoy profundamente descolocado … y me consta que no solo soy yo, sino que hay muchos otros en mi misma situación.

La pregunta que está ahora en todas las bocas es: ¿Vamos a cumplir el objetivo de déficit o no lo vamos a cumplir?.

El tema es tan candente que esta mañana lo estaban discutiendo, en el bar donde suelo tomar el café mañanero, dos transportistas de bebidas con un operario de un taller cercano. Y lo curioso del caso es que manejaban términos tan raros como PIB, deficit por cuenta corriente, deficit comercial, prima de riesgo, etc. con una soltura que riete tu de un catedrático en economía.

Pero lo que realmente me tiene fuera de mi es que, por mucho que me he intentando documentar, leyendo varios períodicos de distinto signo, cambiando el dial de mi receptor radiofónico, tragandome, en los últimos días, las infumables declaraciones de los políticos de turno, no he conseguido saber si vamos a cumplir o no el objetivo, no me he aclarado si el famoso cuatro y pico por ciento es fijo o se va a relajar, no he podido concluir si somos un país serio o una panda de mangarranes, …



Ya sabéis que yo suelo ser amigo de la idea de que la vida solo puede ser interpretada desde las tonalidades de gris, o sea que nada es blanco ni negro sino todo lo contrario, pero una cosa es aceptar que puede haber matices en todo y otra cosa es que nos quieran hacer comulgar con ruedas de molino.


Lo triste de todo esto es que nos va a dar igual. Sea cual sea el objetivo de déficit que nos marquen desde TEUTONIA, no nos va a quedar más remedio que apretarnos el cinturon porque, ya se sabe, “a perro flaco todo se le vuelven pulgas”.


Un abrazo “despistado”,

Esteban

viernes, 27 de enero de 2012

MUNDO AL REVÉS


Hola:

Hoy he visto, publicada, una foto que me ha “epatado” profundamente. 

Nuestro presidente del gobierno, a la sazón D.Mariano Rajoy, tomando de la mano a la canciller alemana, Dña. Angela Merkel, como quien coge a un niño pequeño para evitar que se caiga o para guiarle por un camino dificil.

La foto en cuestión pareciera un contra-sentido porque ¿No es Angela Merkel la que nos guia, a todos los europeos, por los intrincados caminos de la crísis económica? ¿Es que han cambiado las tornas y “por fín” somos alguien en Europa? ¿Es posible que, en el fondo, la “dama de titanio” teutona, sea una frágil damisela que se deja conducir por un caballero español?.

Decía Don Quijote: “COSAS VEREDES, AMIGO SANCHO” y yo, con una frase un poco más moderna, añado: “VIVIR PARA VER”.

Un abrazo “sorprendido”,

Esteban

miércoles, 18 de enero de 2012

LOS RECORTES DE LAS HOSTIAS


¡Que nadie se lleve las manos a la cabeza! ¡Que no he decidido empezar a usar palabras malsonantes en mis post! pero seguid leyendo y lo veréis………
No se si mucha gente sabe que las “hostias” u “obleas” que se usan en la misa católica, se fabrican partiendo de láminas (compuestas de una pasta de harina y agua) mediante un sacabocados circular de diametro determinado. La parte de la lámina que queda despues de la extracción de las secciones circulares se llama (o así la conociamos) “recortes”. ¡Cuantas bolsas de esos recortes me habrá dado el cura de mi barrio por echarle un cable moviendo los bancos de la iglesia cuando era crio!. Mezclados con leche fria eran una delicia, por cierto…….
Como véis, no hay que confundir las “hostias” con las “ostias” que, evidentemente tienen otro siginificado.
Lo que pasa, no os voy a engañar, es que el título de marras me da píe para hablar de otros “recortes” y de otras “ostias”.
Tengo la sensación de que nos están vendiendo el mensaje de que los recortes son unos sacrificios que tenemos que hacer (y ahí si que estaría bien usar la acepción de “hostia” como “cosa que se ofrece en sacrificio”) para arreglar el desaguisado aunque realmente los que nos quieren decir es que nos tenermos que tragar los recortes “a ostias”, o sea, “por cojones”.
Yo no se si la política de recortes es la acertada o si hay que hacer una política expansiva para relanzar la economía o ¡yo que se! pero de lo que si estoy seguro es que los ricos van a seguir siendo igual de ricos (o más) y los pobres van a seguir siendo igual de pobres (o más) despues de estas medidas.
¡Y que siga la juerga!
Un abrazo “desesperanzado”
Esteban